No toda la belleza del paisaje puede quedar impregnada en una fotografia, pero la oportunidad hace al fotógrafo. Esta imagen corresponde a un pedazo de cielo en Italia, casi no se nota pero al fondo a la derecha se logra ver una importante montaña «el Monviso» que no quise dejar de lado, aunque para un buen observador no pase desapercibido. Mi idea en esta foto era plasmar los contrastes, la sombra que va dando paso el alba, que deja al descubierto las frescas tierras de interminables viñedos de «Le langhe». Para el buen observador hay la perspectiva de un camino también.
Aunque hay un detalle importante en la composición y lo representa la capa de nubes al lado de la colina verde, pero se trata de una inusual neblina que en diversos días de verano aparece y desaparece por los contrastes de vientos y humedad. Es una foto que llamaría finalmente «»El alba del viñedo».
Arnaldo Quispe.
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